Artículo de David Lahoz
Sin duda una de las instalaciones más espectaculares del Campeonato de España de Scalextric y Slot es la de la subida en cuesta. Este inmenso tramo en forma de letra U parte del nivel del suelo para finalizar en su cota más alta que supera los dos metros de altura realizando el proceso de ascensión en diferentes terrazas con pendientes dispares.
El primer brazo de la instalación dispuesta en un plano inclinado empieza con una zona rápida en la que se intercalan giros de 180 grados que desembocan en la primera zona de “paellas”. Antes de girar a 90 grados a la desecha para acometer la segunda sección el piloto pierde su coche un par de veces de vista al pasar bajo dos túneles.
La segunda sección sigue con la misma tónica partiendo de una altura de un medio metro, superando ya en la zona final el metro de altura que pasa a la última de las secciones que es sin duda la más espectacular.
Claramente dividida en dos niveles, el nexo de conexión entre ellos se realiza con una empinada cuesta, soportada por un puente que finaliza en un túnel. Este elemento final hace especialmente complicada la frenada de la recta más larga del tramo ya que justo a la salida del túnel topamos con una cerrada curva.
Otra zona de paellas sirve de antesala al tramo final que nos lleva a la cima a través de el tramo que supera mayor desnivel en menor especio y que discurre sobre un río de montaña que brota de una cascada situada en la cima.
Tras la zona de final de tramo existe una amplia zona de desaceleración donde la asistencia del piloto que ha controlado la ascensión del coche podrá recogerlo.
El pilotaje se realiza desde una tarima situada en el centro del tramo y elevada más de un metro para que el piloto tenga una visión clara de la totalidad del revirado tramo.
La realización de esta instalación ha supuesto más de 100 horas de trabajo, tanto por la complejidad de la construcción de la estructura modular que la soporta y que está construida con soportes metálicos recortados (tipo Mecalux) sino por la cuidada decoración y ambientación de todo el tramo.
Se podían pasar largos minutos contemplando la totalidad del tramo, plagado de pequeños detalles y curiosidades que demuestra la meticulosidad y cariño empleados en su construcción.
A destacar el montaje del sistema de agua que brotaba de la cima de la montaña y que recorría parte del tramo y que como buen curso alpino humeaba gracias a la instalación de hielo seco.
La llegada a la cima de cada uno de los participantes, sea cual sea la clasificación final seguro que ha sido una experiencia que ha valido la pena y que será difícil de olvidar.